Gracias queridos amigos!!! A toda la gente que en algún momento se ocupó de mi.
A todos los que velaron por mi bienestar.
A los amigos, conocidos y enemigos, de todos me nutrí, y con todos, en algún momento me emocioné.
Gracias a la gente que abrió las puertas de su casa, me sentó a su mesa y abrigó mis inviernos.
Gracias a VOS, porque desde tu ausencia, se despertaron los duendes de la poesía...
A mi Pueblo, Sauce, Corrientes, donde vibré con los primeros aplausos.
A la familia.
Para mi viejita, una página aparte, por la vida, por estimular los sueños, por acompañarme en todo momento y regalarme mi primera guitarra.
Amigos del alma, mis respetos: Por estar y bancarme como soy, que no es tarea fácil.
GRACIAS A DIOS...
Julio Zapata.-
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